Nuestra siempre risueña hermana Dominga, quien viera por primera vez la luz un 24 de Mayo, día de la Virgen María Auxiliadora, partió a hoy al lado del Señor, un 16 de julio, festividad de la Virgen del Carmen, lo que nos da una vez más pruebas, de su vida marcada en torno a la Virgen María que tanto amó y signó su paso por esta tierra.
Hoy cuando nuestros corazones se sobrecogen de dolor al saber que un repentino problema de salud nos la ha quitado, ella ya se encuentra al lado de nuestro Dios Padre, velando desde el cielo por todos nosotros…por su colegio, por sus niños, por sus jóvenes, por sus profesores, por los padres de estos estudiantes, por la madre Marissa su compañera de batallas educativas, por su familia, por sus amigos y todos quienes la lloramos al no verla correr inquieta por este patio…
Conozcamos pues, algo la valiosa vida de esta mujer de mucho carisma, descrita como muy alegre, cariñosa, pero a la vez muy arriesgada, decidida y emprendedora, como una hormiguita que nunca dejaba de laborar y dar ideas; quien buscaba siempre la comodidad o alegrías del otro; que no tenía tiempo para un rencor, pero si tiempo para convertirse en niña con los pequeños o en joven con los adolescentes a quienes llevaba de paseo, o en mamá protectora para aconsejar con voz dulce y dejar que las criaturas cuelguen de su cuello.
LA NIÑA RELIGIOSA. Nuestra digna hija del Señor llegó a este mundo hace 60 años bajo el nombre de Rosa Elvira Zúñiga Majuan. Se crió en un hogar limeño, de padres muy católicos y entre 5 hermanos.
Siendo solo una niña iba y venía constantemente de la iglesia, participando de los movimientos católicos, tanto así que llegó a ser catequista, legionaria de la Legión de María y otras tareas religiosas que la tenían en constante ajetreo.
Por ello una vez su madre le diría: “para ya hijita, ¿porque eres tan inquieta?, te vas a envejecer pronto” y ella le respondió, “mamá, es mejor morir cansada que llegar a la vejez sin haber hecho nada”.
SU VIDA AL LADO DE DIOS. Hace más de 30 años Rosa Elvira entregó su vida a Dios, bajo el nombre de Sor Dominga y ha recorrido muchos lugares de gente necesitada, siempre como una sembradora de las semillas del bien. Nuestra hermana religiosa, con amor especial a Santo Domingo y Francisco, ha sido impulsora en Perú del Movimiento Católico Comunión y Liberación, creado por el reconocido Monseñor Luigi Giussani, a quien tuvo el privilegio de conocerlo personalmente y cuyos mensajes marcaron su vida.
Entre algunas de sus labores, está la tramitación y creación junto con otras religiosas, de la institución Educativa Virgen del Rosario de Barranco. Trabajó como Misionera en Huari (Ancash), y en el Callao, en el Asentamiento Humano Sarita Colonia, en la Parroquia San Agustín y su Colegio Parroquial Agustín de Hipona, en la Casa de Huérfanos de Lurín, entre otras misiones hasta llegar a ser la Promotora e Impulsora de la Institución Educativa Católica Santa María del Rosario, que hoy la ve partir.
SIEMPRE LIGADA A LA EDUCACIÓN. La Hermana Dominga se graduó como Sicóloga en la Universidad San Martín de Porras, estudió Educación en la Universidad Marcelino Champagnat, siguió una Maestría en Educación en la Universidad Complutense de España y hace más de una década, cuando era Jefa del Área de Gestión Pedagógica de la UGEL 01, decidieron con su amiga, la Hermana Marissa, de amplia trayectoria y preparación educativa, iniciar en Tablada de Lurín una comunidad educativa para formar niños y jóvenes de servicio en torno a Dios. Sin embargo, fue la población del lugar que insistió en la creación de este Colegio Católico y las Hnas. Marissa y Dominga decidieron iniciar hace 11 años la Institución Educativa Santa María del Rosario, con educación inicial y primaria. Pero otra vez la comunidad les pidió ampliar hasta educación secundaria, siendo esto una bella realidad hasta nuestros días.
Nuestro colegio, está hoy en convenio con la Universidad Católica Sede Sapientiae y ligado al “Movimiento Católico Comunión y Liberación” de difusión en el mundo entero. Cuya espiritualidad una vez conocida le sirvió de guía e inspiración en su vida personal y quehacer diario.
SOLO UN HASTA LUEGO. La Hermana Dominga se nos ha adelantado, quizá muy pronto en el camino a la vida eterna… Ya no la veremos en actitudes sorprendentes, como trepar un techo para chequear la obra de construcción, ya no la veremos correr y saltar entre los niños como uno más, o insistir casi sin dormir en alguna obra que quería conseguir… Pero si tenemos presente sus consejos y enseñanzas, continuaremos su obra y su sonrisa nunca se apagará. Hace menos de 3 meses al celebrársele su cumpleaños comentó, “¿EN EL CIELO HABRÁ ALGO QUE HACER?, PORQUE NO ME GUSTARÍA ESTAR SIN HACER NADA”… Estamos seguros Hermana Dominga que tienes mucha tarea velando por todos nosotros y disfrutando de la alegría de estar al lado de Dios…descansa en paz querida Dominga.