sábado, 19 de junio de 2010
Monseñor Severo Aparicio, O.M.,Presidente Honorario de la Academia Peruana de Historia Eclesiástica
Fundador de la Academia Peruana de Historia Eclesiástica, desde el pasado 19 de junio es presidente honorario vitalicio. Nació el 8 de octubre de 1923, fue ordenado sacerdote el 23 de septiembre de 1951 y consagrado obispo el 4 de marzo de 1979. En diciembre del 2009 recibió el doctorado honoris causa por la Universidad Nacional San Antonio Abad del Cuzco como se indica en la Revista Mercedaria (Enero-Diciembre 2009, Año X, Nº 10).
Les comparto la entrevista realizada para la Revista STUDIUM de la Universidad Católica Sedes Sapientiae. Nos acercamos a la paz del claustro mercedario de Lima, donde nos recibe para conversar acerca de la historia y de la vida de la Iglesia, desde el carisma mercedario, su alma de pastor y su corazón cusqueño.
1. Monseñor: ¿Por qué su dedicación casi exclusiva al estudio de la Orden Mercedaria?
Desde mi ingreso a la Orden de la Meced, nació el amor y admiración a su historia, especialmente a su desarrollo en el ámbito peruano. Desde que estudiaba Teología me interesó esta historia, interés que cuajó con la especialidad que seguí en la Facultad de Historia de la Iglesia en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma. Debo aclarar que junto a la historia de la Merced, también me he ocupado de otros temas de la historia de la Iglesia, tales como: José Sebastián Goyeneche, arzobispo de Lima (Tesis de licenciatura), Túpac Amaru y la Iglesia. Antología (1983), El Clero y la Rebelión de Túpac Amaru (2000), y otros
2. ¿Cómo ha podido hacer compatible su permanente preocupación pastoral con la investigación histórica?
Al iniciar mi labor pastoral, con pena y sentimiento, tuve que empaquetar y guardar mis fichas y apuntes sobre historia, fruto de años de paciente dedicación. Pero, pronto surgieron conmemoraciones de acontecimientos como el Bicentenario de la Rebelión de Túpac Amaru y los 500 años del inicio de la Evangelización de América, que motivaron la realización de simposios y congresos, así en el Perú como en el extranjero. No podía sustraerme al recibir invitaciones y pedidos para participar en dichos eventos con conferencias y ponencias. Así nacieron mis escritos sobre la presencia y labor evangelizadora en el Perú de los mercedarios así como religiosos de las demás órdenes religiosas.
3. Háblenos de sus padres, su familia, su primera escuela, sus raíces, su vocación inicial...
Nací en el distrito de San Pedro, provincia de Canchis, departamento del Cuzco. Viví en un ambiente de amor, respeto y piedad, donde la figura central era la madre, como ejemplo de piedad y factor de unión, que ayudó sin duda a mi vocación a la vida religiosa.
4. 50 años de sacerdote, ¿qué vivencias afloran al celebrar tan fausto acontecimiento? Familia, colegio, vocación...
Al culminar los estudios de Teología en la Pontificia Universidad Católica de Chile, recibí el sacerdocio en la catedral de Santiago, el 22 de septiembre de 1951, de manos del arzobispo Mons. José María Caro. Aunque lejos y solo, me sentí rodeado del afecto y amistad de seis mercedarios compañeros de estudios.
5. ¿Sus maestros de historia en la Gregoriana?
En la Facultad de Historia de la Iglesia de la Universidad Gregoriana, entre 1969 y 1974, tuve excelentes maestros jesuitas de diversa nacionalidades, cuya calidad humana e intelectual siempre he admirado, y a quienes los recuerdo con especial afecto y gracia Villoslada, Miguel Batllori y Antonio de Egaña, éste último el director de mi tesis doctoral.
6. De los Mercedarios, es bien palpable la antipatía sentida por los vicarios españoles de su Orden, ¿por qué?
No es que abrigue yo sentimientos de antipatía a los llamados vicarios generales de la Merced que, durante la colonia, ejercieron la alta autoridad sobre las provincias Mercedarios y América. Fueron dos vicarios: uno en el virreinato de México y otro en el de Lima. Lo que critico es que, en el ejercicio de su autoridad en representación del Maestro General que residía en Madrid, algunos de ellos, en la práctica, obstaculizada y anulaba la autoridad de los superiores provinciales en el gobierno de la provincia. En lugar de alentar la vida religiosa y dinamizar la labor misionera de los frailes, algunos eran objeto de rechazo e instrumento de división entre los religiosos. No faltaron quienes tuvieron especial preocupación por la plata para remitir o llevar a España. Hubo también entre ellos excelentes religiosos.
7. Por el contrario, hay mercedarios que usted habría elevado a los altares, Diego de Porres, En una institución religiosa de larga trayectoria histórica como es la Merced, siempre surgen sujetos destacados en los diversos campos de la actividad. Puedo mencionar como misioneros a Diego de Porres y a Martín de Murúa, como religiosos virtuosos a Pedro de Urraca, Francisco Salamanca, Sebastián del Espíritu Santo y otros; como maestros en San Marcos a Juan Báez, Diego de Ayllón y Calatayud y Borda; como obispo a Francisco Gutiérrez Galiano y José Higinio Durán Martel; como político a Melchor Talamantes. Personajes dignos de admiración por su imagen paradigmática.
8. Fundador de la Academia de la Historia de la Iglesia en Perú. ¿Qué pretende? ¿Cuáles son sus frutos?
La Constitución Política del Perú dice que el “Estado reconoce a la Iglesia Católica como elemento importante en la formación histórica, cultural y moral del Perú” (Art. 50). Esta rica y compleja realidad espera del historiador un estudio amplio y profundo. A ello tienden las miras de la Academia Peruana de Historia Eclesiástica. Además, países con menos riqueza histórica que la Iglesia Peruana, tienen sus respectivas Academias de Historia Eclesiástica.
9. Con la sinceridad que le caracteriza. Alguien me dijo que le faltaba dinamismo, ¿problema de plata-subvención, falta de tiempo para dedicarse, sensibilidad por parte del episcopado, entre los lectores?
Nuestra Academia, como fruto de sus actividades, publica la Revista Peruana de Historia Eclesiástica, que hasta el presente lleva seis números monográficos, ofreciendo en sus páginas una visión más detenida sobre diversos aspectos del pasado de la Iglesia Peruana. Nuestra Academia es una institución sui generis, en el sentido de que sus miembros de número tienen su residencia en las diferentes ciudades del país, hecho que en la práctica dificulta la normal realización de las sesiones.Por otro lado, no faltan dificultades, como la escasez de medios económicos, aspecto importante en toda actividad cultural.
10. Recuerdos de su magisterio docente
Si se me pregunta por mi magisterio, debo decir que fui profesor de Religión y Castellano en el Colegio San Pedro Nolasco de Santiago de Chile, en el Colegio de la Merced del Cuzco; de Latín en la Universidad Nacional de San Antonio Abad del Cuzco; de Historia de la Iglesia en la Facultad de Teología Pontificia y Civil de Lima y en el Seminario de San Antonio Abad del Cuzco.
11. Amigos historiadores
En mis andanzas conocí a destacados historiadores tanto nacionales como extranjeros, así eclesiásticos como laicos. A Miguel Maticorena le conocí en marzo de 1963 en el Archivo General de Indias de Sevilla, adonde yo llegaba por primera vez. Desde entonces tenemos estrecha amistad. Particular estima y admiración merecen, entre otros, hombres como Guillermo Lohman, Horacio Villanueva y Félix Denegri Luna, este recientemente fallecido.
12. Cuzco, qué le evoca
El Cuzco representa el pasado de un gran pueblo que se llamó el Tahuantinsuyo, cuyo legado histórico y cultural es objeto de justa admiración e interés en nuestros días. Aunque amenazado de falsas retóricas y mistificaciones, es el centro de atracción permanente. Otro tanto ocurre en lo religioso, por el espíritu cristiano de su gente, por sus fiestas fastuosas y tradiciones
13. Nunca ha ocultado su simpatía por los clérigos tupacmaristas o independentistas, ¿es así o sólo apariencia?
Mi simpatía por los clérigos tupacamaristas es sincera y no habría lugar para apariencias. Es admirable la actitud de aquellos sacerdotes que, desafiando la sumisión y el servilismo a la corona de parte de la mayoría, supieron reconocer el mensaje de Túpac Amaru en su rebelión contra el abuso y la opresión de que eran objeto los indígenas. Por su actitud valiente muchos sacerdotes tuvieron que sufrir persecuciones y duros castigos, entre los cuales se destaca José Maruri, cura de Asillo.
14. Perú
La identidad cristiana del Perú es una realidad admirable, aunque amenazada en nuestros días por tantas fuerzas negativas. El Perú es un territorio donde la Iglesia alcanzó su plena realización, hecho visible en los santos que dio y en el florecimiento de instituciones inspiradas y creadas por ella.
15. Universidad de San Marcos
Precisamente entre estas instituciones está la Universidad de San Marcos de Lima, fundada por religiosos dominicos y reconocida oficialmente en 1551, cuyo 450 aniversario recuerda este año el Perú. Durante la colonia esta Universidad, en forma permanente, contó entre sus catedráticos a frailes de las diversas órdenes religiosas existentes en Lima. Entre ellos los mercedarios tuvieron muy destacada labor frente a diversas cátedras, desde 1578 hasta 1855. Cerca de 37 mercedarios regentaron diversas cátedras en San Marcos. En mi libre: Los mercedarios en el Universidad de San Marcos de Lima, 1999, me ocupo de cada uno de ellos.
16. Juan Pablo II
Para un obispo siempre son imborrables los encuentros con el Jefe y Cabeza de la Iglesia. Tanto en Roma, con ocasión de las visitas ad limina, cono en el Perú, en sus dos visitas a nuestro país, me tocó estar cerca de Sus Santidad. Respecto a la Historia de la Iglesia, Juan Pablo II, siempre atento a cualquier acontecimiento eclesial, para recordar los 500 años del inicio del la Evangelización de América, dispuso el año 1992 la realización en el Vaticano de un Simposio Internacional sobre la Historia de la Evangelización de América, cuyas Actas fueron editadas por la Pontificia Comisión para América Latina con el título de Historia de la Evangelización de América. Trayectoria, identidad y esperanza de un Continente. Ciudad del Vaticano, 1992. Así mismo, por expreso deseo del Papa, en junio de 1999, la mencionada Pontificia Comisión organizó en el Vaticano el Simposio Histórico, con ocasión del Centenario del Concilio Plenario de América Latina. Las actas fueron publicadas, en un monumental volumen, con el título de Los últimos cien años de la Evangelización de América Latina Simposio Histórico. Actas. Ciudad del Vaticano, 2000.
Ambos eventos en los cuales participe, fueron rubricados, con magistrales discursos de Su Santidad, sobre el significado y proyección de estos acontecimientos en el futuro de la Iglesia de América.
17. Nuevo Milenio-Nueva Evangelización
Con la clarividencia propia de él, el Papa Juan Pablo, mediante su carta apostólica Tertio Millennio Ineunte, traza para la Iglesia del tercer milenio, todo un programa de vida y de acción pastoral con las notas características de una Profesión del futuro.
18. Nos encontramos en Carabayllo, ¿qué papel tuvieron los Mercedarios?
Los mercedarios fueron los fundadores de la doctrina de San Pedro de Carabayllo. Así, cuando en julio de 1593 Santo Toribio inicia por Carabayllo la visita pastoral a su extensa diócesis, encuentra allí como doctrinero o cura al mercedario Fr. Diego de Haro. Monseñor Lino Panizza, primer Obispo de Carabaillo, ha tenido la gentileza de pedirme datos históricos sobre la primera evangelización de dicho territorio. Con los datos que poseo, renuevo la promesa de cumplir con los deseos del prelado.
19. Terminemos con la Madre, Nuestra Señora de la Merced, ¿qué nos diría de Ella para terminar?
. La Virgen María en su advocación de nuestra Señora de la Merced, por ser la patrona de la Orden, aparece íntimamente vinculada a la vida y acción evangelizadora de los religiosos a lo largo y ancho de las antiguas provincias mercedarias de Lima y Cuzco. Ello explica la vigencia actual de la devoción a la Virgen de la Merced en las ciudades, en los pueblos y antiguas comunidades campesinas. Fue muy popular la devoción a la Virgen de la Merced, llamada la Peregrina cuya pequeña imagen era llevada por los pueblos en demanda de limosna para redimir a los cautivos cristianos en el norte de África.
20. Algo más que desee añadir como mensaje para nuestra Comunidad Universitaria
Estoy informado de los bríos con que ha nacido la nueva Universidad Católica Sedes Sapientiae, en los predios de la Diócesis de Carabaillo, a iniciativa de su primer Obispo Monseñor Lino Panizza. Sé igualmente que en sus claustros se da preferencia al estudio serio y profundo del humanismo cristiano, como trasfondo y alma de la cultura superior. Por eso, expreso a las autoridades y estudiantes de la flamante Universidad mis mejores augurios y votos por su vigoroso crecimiento. Los acompaño con mis oraciones.