domingo, 1 de septiembre de 2013

EL PAN ESPIRITUAL NUESTRO DE CADA DÍA. LA ORACIÓN DEL MILITANTE


Tras el periodo estival de vacaciones (julio-agosto) vuelve cada día este alimento espiritual con los PUNTOS DE ORACIÓN que preparan los Militantes de Santa María, día a día. Me da mucho gusto compartírtelos y si te animas puedes solicitarlos a oraciondelmilitante@gmail.com

http://www.oraciondelmilitante.blogspot.com/


02/09/2013, Lunes de la XXII semana de Tiempo Ordinario

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Tesalonicenses (4, 13-18)

Hermanos, no queremos que ignoréis la suerte de los difuntos para que no os aflijáis como los hombres sin esperanza. Pues si creemos que Jesús ha muerto y resucitado, del mismo modo, a los que han muerto, Dios, por medio de Jesús, los llevará con él. Esto es lo que os decimos como palabra del Señor: Nosotros, los que vivimos y quedamos para cuando venga el Señor, no aventajaremos a los difuntos. Pues él mismo, el Señor, cuando se dé la orden, a la voz del arcángel y al son de la trompeta divina, descenderá del cielo, y los muertos en Cristo resucitarán en primer lugar. Después nosotros, los que aún vivimos, seremos arrebatados con ellos en la nube, al encuentro del Señor, en el aire. Y así estaremos siempre con el Señor. Consolaos, pues, mutuamente con estas palabras.

Salmo responsorial (Sal 95, 1 y 3. 4-5. 11-12a. 12b-13)

R. El Señor llega a regir la tierra.

Cantad al Señor un cántico nuevo, cantad al Señor, toda la tierra.

Contad a los pueblos su gloria, sus maravillas a todas las naciones. R.

Porque es grande el Señor, y muy digno de alabanza, más temible que todos los dioses. 

Pues los dioses de los gentiles son apariencia, mientras que el Señor ha hecho el cielo. R.

Alégrese el cielo, goce la tierra, retumbe el mar y cuanto lo llena;

vitoreen los campos y cuanto hay en ellos. R.

Aclamen los árboles del bosque, delante del Señor, que ya llega,

ya llega a regir la tierra: regirá el orbe con justicia y los pueblos con fidelidad. R.

Lectura del santo evangelio según san Lucas (4, 16-30)

En aquel tiempo, fue Jesús a Nazaret, donde se había criado, entró en la sinagoga, como era su costumbre los sábados, y se puso en pie para hacer la lectura. Le entregaron el libro del profeta Isaías y, desenrollándolo, encontró el pasaje donde estaba escrito: «El Espíritu del Señor está sobre mí, porque él me ha ungido. Me ha enviado para anunciar el Evangelio a los pobres, para anunciar a los cautivos la libertad, y a los ciegos la vista; para dar libertad a los oprimidos, para anunciar el año de gracia del Señor.» Y, enrollando el libro, lo devolvió al que le ayudaba y se sentó. Toda la sinagoga tenía los ojos fijos en él. Y él se puso a decirles: -«Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír.»  Y todos le expresaban su aprobación y se admiraban de las palabras de gracia que salían de sus labios. Y decían: -«¿No es éste el hijo de José?» Y Jesús les dijo: -«Sin duda me recitaréis aquel refrán: "Médico, cúrate a ti mismo Y'; haz también aquí en tu tierra lo que hemos oído que has hecho en Cafarnaún.» Y añadió: -«Os aseguro que ningún profeta es bien mirado en su tierra. Os garantizo que en Israel habla muchas viudas en tiempos de Elías, cuando estuvo cerrado el cielo tres años y seis meses, y hubo una gran hambre en todo el país; sin embargo, a ninguna de ellas fue enviado Elías, más que a una viuda de Sarepta, en el territorio de Sidón. Y muchos leprosos habla en Israel en tiempos de] profeta Elíseo; sin embargo, ninguno de ellos fue curado, más que Naamán, el sirio.» Al oír esto, todos en la sinagoga se pusieron furiosos y, levantándose, lo empujaron fuera del pueblo hasta un barranco del monte en donde se alzaba su pueblo, con intención de despeñarlo. Pero Jesús se abrió paso entre ellos y se alejaba.

 

Lunes de la XXII semana de Tiempo Ordinario – Puntos de oración

1.      Vamos a situarnos ante el evangelio de este día:

a.       Desde hoy lunes, hasta el final del Año Litúrgico, vamos a leer al evangelista S. Lucas. Como habéis visto, comenzamos por el capítulo cuarto, y esto es debido, a que  los tres primeros capítulos se reservan para el Adviento y la Navidad.

b.      No hay un acuerdo claro, sobre la pregunta, de por qué S. Lucas sitúa en su evangelio el relato del rechazo de Nazaret al principio de su narración del ministerio en Galilea, mientras que S. Mateo y S. Marcos lo ubican mucho más tarde.

                                                i.      Algunos han sugerido la posibilidad de dos rechazos en Nazaret, uno implícito y otro más explícito...

                                              ii.      Lo cierto es que es un reflejo de dos tendencias ante la persona de Jesucristo: Interés y asombro entusiasmado al principio..., y luego un claro rechazo...

2.      Pasemos a la lectura texto y comencemos nuestra oración:

a.       "En aquel tiempo, fue Jesús a Nazaret, donde se había criado, entró en la sinagoga, como era su costumbre los sábados..."

                                                i.      Jesús asiste a la sinagoga donde se encuentre..., y en particular en el día de reposo, pero solo aquí (Lc.4,16) se añade "era su costumbre".

                                              ii.      Si es cierto que Jesús, en cuanto a conocimiento y sabiduría, estaba muy por encima de cualquier otro que impartiera instrucción en la sinagoga, él no dejaba de asistir.

                                            iii.      El ejemplo de Jesús nos trae a la memoria pasajes tales como:

1.      Dt. 12,5: " sino que buscaréis el lugar que el Señor vuestro Dios eligiere de entre todas vuestras tribus para poner allí su nombre y morar en él, e iréis allí..."

2.      Sal. 84,1-4: ¡Qué deseables son tus moradas, | Señor del universo!  3 Mi alma se consume y anhela | los atrios del Señor, | mi corazón y mi carne | retozan por el Dios vivo. 4 Hasta el gorrión ha encontrado una casa; | la golondrina, un nido | donde colocar sus polluelos: | tus altares, Señor del universo, | Rey mío y Dios mío.

3.      Heb. 10,25: "no faltemos a las asambleas, como suelen hacer algunos, sino animémonos tanto más cuanto más cercano veis el Día."

3.      "y se puso en pie para hacer la lectura. Le entregaron el libro del profeta Isaías y, desenrollándolo, encontró el pasaje donde estaba escrito.."

a.       ¿Cuál era la secuencia de la liturgia en la sinagoga en tiempos de Jesús?

                                                i.      Las acciones de gracias o "bendiciones" pronunciadas en relación con el Shemá.

                                              ii.      La oración. La asamblea respondía "Amén" al unísono.

                                            iii.      Lectura de un pasaje del Pentateuco. Esta la hacían los rabinos...

                                             iv.      Lectura de un pasaje de los Profetas. Esta podían hacerla los laicos que hubieran cumplido los 30 años.

                                               v.      La palabra de exhortación.

                                             vi.      La bendición si había un sacerdote o la oración final si no lo había...

4.      «El Espíritu del Señor está sobre mí,

a.       porque él me ha ungido.

b.      Me ha enviado

                                                i.      para anunciar el Evangelio a los pobres,

                                              ii.      para anunciar a los cautivos la libertad,

                                            iii.      para dar  a los ciegos la vista;

                                             iv.      para dar libertad a los oprimidos,

                                               v.      para anunciar el año de gracia del Señor.»

5.      "Y, enrollando el libro, lo devolvió al que le ayudaba y se sentó. Toda la sinagoga tenía los ojos fijos en él. Y él se puso a decirles: -«Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír.»

a.       ¡Qué pasaje más interesante leyó Jesús! Y entonces sucede lo inesperado... Tratemos de imaginar la situación:

                                                i.      La atmósfera se sobrecarga de curiosidad...

                                              ii.      ¡Qué será lo que va a decir el carpintero...!

                                            iii.      ¡Todo está silencioso...!

                                             iv.      ¡Todos los ojos están fijos en Jesús…!

                                               v.      El abre su boca, y comienza su discurso...

b.      Y en lugar de recordad la edad de oro, que ya no volvería..., ni de entretener a sus oyentes con promesas óptimas en cuanto al futuro... En lugar de eso, él habla del aquí y ahora...!

                                                i.      El aseguro a su pueblo que la edad de oro realmente había llegado.

                                              ii.      "Hoy", dice, "en vuestros propios oídos, el pasaje que había leído, se estaba cumpliendo...

                                            iii.      Y lo cierto era que era verdad... ¿Acaso no estaban los ciegos recuperando su vista, los cojos caminando, los leprosos siendo sanados…? ¿No estaban siendo proclamadas las buenas nuevas a los pobres…? ¿Y quién era el Siervo del Señor a través del que se estaba cumpliendo todo esto...?

6.      Y entonces el auditorio reacciona:

a.       Con asombro...

                                                i.      "Y todos le expresaban su aprobación y se admiraban de las palabras de gracia que salían de sus labios..."

b.      Con dudas...

                                                i.      "Y decían: -«¿No es éste el hijo de José?»

c.       Con violencia...

                                                i.      "...todos en la sinagoga se pusieron furiosos y, levantándose, lo empujaron fuera del pueblo hasta un barranco del monte en donde se alzaba su pueblo, con intención de despeñarlo."

7.      Y nosotros... ¿Cómo reaccionamos hoy ante este evangelio que la Iglesia nos proclama..?

a.       "Hoy se cumple esta Escritura"

                                                i.      Es lo que pasa cada día en nuestra escucha de las lecturas biblias...

                                              ii.      No se nos proclaman para que nos enteremos de lo que pasó.., lo sabemos ya.., sino porque Dios quiere renovar su gracia salvadora, hoy, aquí y ahora con nosotros... Esto es lo que nuestra meditación debe buscar..., debe esperar..., debe anhelar... ¡Ábreme los ojos Señor..! ¡Líbrame..., Señor...! ¡Y contemplaré las maravillas de tu Voluntad...!



 

José Antonio Benito Copyright © 2009 Gadget Blog is Designed by Ipietoon y adaptado por ANGEL SANTA MARIA R. Sponsored by Online Business Journal