lunes, 21 de marzo de 2016

EL PLACER DE DONAR TU SANGRE. ¡CUANDO LLEGAS A CIEN!

EL PLACER DE DONAR TU SANGRE. ¡CUANDO LLEGAS A CIEN!

Gracias al Señor he podido donar sangre nuevamente, y ya van 100. Comencé hace casi 40 años. Hoy he vuelto, por el papá de un gran amigo a quien operarán de hernia discal. La mayoría de veces fue anónima. Por esta razón, al encontrarme con el gran impulsor de la donación en el Hospital Rebagliati, Carlos Penalillo, me invitó a "salir en la foto" de campaña de motivación y acepté al toque, de mil amores; todo por ayudar a crear una cultura de donación, de voluntariado, de hermandad. Y, así sin querer queriendo, lo primero que veo es el slogan de la campaña: "¡Soy un héroe!". Lo primero que pensé es en aquel gigantesco cartel de cuando hice la mili en España, "Ante Dios no hay héroes anónimos", Él siempre nos ve, Él siempre nos ama, Él siempre nos regala; el hecho de poder donar, de gozar de salud, de tener tiempo, de estar con la edad…es un privilegio, un tesoro que si no se comparte se malogra. Con mucho gusto les animo a DONAR. Cuanto más donamos, más ganamos; decía Teresa de Calcuta que a la otra vida sólo nos llevamos lo que damos.

1.      Gracias, Sra. Facunda. Tengo como recuerdo la constancia de mi donación, recién llegado al Perú, en mi primera visita como voluntario y fue una auténtica gracia poder dar a esta señora que estaba con cáncer y a punto de morir en Candarave, mi querido pueblo adoptivo en los Andes de Tacna. Era la primera persona a quien supe dónde iba mi sangre. Nunca olvidaré su sonrisa agradecida: "Parece que Dios le ha enviado desde tan lejos …".

 

2.      Gracias, Manolo, Vicente. Esta foto está tomada a la entrada del Banco de Sangre cuando nuestro gran amigo Marcos requirió sangre para su hermana Yolanda. En cinco segundo se convencieron mis dos queridos amigos Manolo (ya en la eternidad) y Vicente. Los dos no pudieron donar por la edad…pero estaban dispuestos. Nunca olvidaremos su gesto.

 

3.      Gracias, Éder, porque hoy he podido donar para Jesús, tu papá.

 

Tres razones; sumemos, multipliquemos…conmigo hasta 100. Si ustedes se animan llegaremos a mil, el millón. Todavía recuerdo la cola enorme con motivo de los damnificados del terremoto de Ica; no pude donar ese mismo día…Aquel día sobró. Pero porque fue un día extra. ¿Los demás? Vuelve la incertidumbre, el desasosiego, la inquietud, el nerviosismo… Tenemos que lograr que el Banco de Sangre esté siempre dispuesto para cubrir las necesidades. Algo sencillo que me promovido en mi Universidad Católica Sedes Sapientiae: a todos los ingresantes hacer su ficha con el grupo sanguíneo y preguntarle su disponibilidad en caso de emergencia o como voluntario donante habitual   Lo mismo se puede hacer en las parroquias, en los partidos, en las instituciones, asociaciones…

No me conformo cuando me dicen que aquí no hay tradición, que no hay cultura…Pues habrá que crearla. Lo verdadero, bello y bueno hay que crearlo, potenciarlo, difundirlo.

¿Por qué donar? Es lo mismo que preguntar; por qué amar…Porque si no lo  hago con los demás, si no lo hacen conmigo nos morimos. Gabriel García Márquez escribió aquello tan bello: "Necesito que me quieras para no morirme". O G. Marcel: "Amar a una persona es decirle: Nunca morirás para mí". O Carlos Díaz: "Soy amado, luego existo". Y no necesito que sea "oficialmente" amado: familiar, amigo...porque naturalmente SOY HERMANO DE TODOS. Y siempre, en algún lugar, en cualquier segundo alguien necesitará de mi sangre;  y yo también. ES de bien nacido ser agradecido. Vivo porque otros han vivido para mí. Tengo buenos modelos de personas que han dado su vida, su ejemplo, especialmente Jesucristo que vino para dar vida y darla en abundancia.

Si todavía necesitan más razones, les comparto 5 más http://www.imujer.com/salud/5051/5-razones-para-donar-sangre

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1.      Salvar vidas

En este mismo instante alguien necesita una transfusión de sangre, puede ser una mujer que ha dado a luz, un niño que sufre de anemia, una persona que acaba de sufrir un accidente o pacientes de enfermedades crónicas. Tu podrías salvar sus vidas con una donación de sangre.

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2.      Mejora la textura de la sangre

El hierro es un compuesto que afecta el grosor y la textura de la sangre. Es decir, los niveles altos de hierro hacen que la sangre sea más espesa pero se ha comprobado científicamente que la donación de sangre quita algo de hierro, lo que a la larga puede resultar como un beneficio para adelgazar la sangre y mejorar la circulación.

 

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3.      Reduce el riesgo de ataques al corazón

Según una investigación realizada por el Journal of the American Medical Association, las personas mayores de 43 a 61 años de edad tenían menos ataques al corazón y derrames cerebrales cuando donaron sangre cada seis meses. Sus riesgos se redujeron en al menos el 88 por ciento que aquellos que no donaron.

 

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4.      Baja el riesgo de cáncer

Otro estudio publicado por el Journal of the National Cancer Institute también determinó que la donación de sangre se vincula con la reducción del riesgo de cáncer. El estudio contó con 1.200 personas que hicieron donaciones sangre dos veces al año y según las estadísticas tuvieron menor incidencia de cáncer y mortalidad.

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5.      Quemas calorías

Según la Universidad de California de San Diego, en Estados Unidos, por cada pinta (unidad de medida: 16 onzas líquidas) de sangre donadas, el cuerpo quema 650 calorías. Se estima que luego de la donación el cuerpo reemplaza todo el volumen de la sangre dentro de 48 horas y todas las células rojas de la sangre dentro de cuarenta semanas.

Amigo, si tienes sangre en las venas, dónala. Alguien vivirá por ti y te lo agradecerá. La vida seguirá siendo bella gracias a ti. Dios quiera que en el Perú se cree la Hermandad de Donantes; al menos, aquí hay uno

José Antonio Benito

 

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