Manuel de los Reyes
La Casa Social Católica de Valladolid (1881-1946)
Renovación social y presencia cristiana
Encuentro, Madrid, 2013, 693 pp
Para quienes todavía duden de que la DSI (Doctrina Social de la Iglesia) sea mucho más que una bella doctrina, para los que todavía piensan que la DSI no pisa tierra, para cuantos creen que la DSI es un coto cerrado del clero o cristianos piadosos, esta monografía es todo un contrapunto. La presente obra representa un paradigma de lo que debe ser una publicación científica, alimentada de todas las fuentes escritas, redactada con belleza y precisión, con ciencia y corazón.
Más allá de un historiador estamos también ante un antropólogo, un sociólogo, un economista, pero también un cristiano comprometido con la verdad y la caridad, que nos ha legado el rostro de esta dinámica institución con denominación de origen en Valladolid y que ha hecho más felices a miles de familias, especialmente las de los obreros más necesitados. La obra desborda el marco local en cuanto que se nos presenta dentro de un contexto más amplio como es el nacional español y universal como es el mundo católico. A pesar de ello, tras la lectura del presente libro, conocemos mucho mejor Valladolid del 1881 al 1946, sobre todo por los protagonistas Muro, Pesquera, Gamazo, Ruiz Hernández, Mambrilla que son pioneros de la acción social cristiana y a los cuales la Ciudad del Pisuerga ha dado su merecido nombre. Entre todos y fruto de la Compañía de Jesús figura el P. Sisinio Nevares auténtico padre de la obra de acción social de la Iglesia y el fundador y consiliario por muchos años de la Casa Social Católica.
El libro comienza con la fundación de la Asociación de Escuelas por el P. Colina en 1881 y termina en 1946 con la muerte del P. Nevares. Se articula en cinco apartados. El primero abarca los años 1881-1912 con los consiliarios PP. Francisco Colina y Marcelino de la Paz y se refiere a la fundación y primeros pasos de la CSC. El segundo comprende la organización, sobre todo en su estructura interna, reglamento y el apunte biográfico del P. Nevares. La tercera, columna vertebral del libro, se refiere al sindicalismo católico agrario y profesional, las organizaciones sociales y culturales, las empresas financieras y productivas, y las instituciones educativas y formativas; siempre está la sombra del P. Nevares. La cuarta de 1925 a 1939, sin el P. Nevares, el advenimiento del P. Cid, se corresponde con los años difíciles de la dictadura de Primo de Rivera y la Segunda República. La quinta sintetiza la historia de la Asociación tras la Guerra, cuenta el desmantelamiento de los sindicatos y el nacimiento de las Escuelas de Cristo Rey. Con complemento figuran fotos e ilustraciones de primer nivel. Así como apéndices muy útiles como los reglamentos de la Asociación Católica Protectora de los Obreros y el del Círculo Obrero de Valladolid. Los Cargos de la Junta Directiva de la CSC de 1914-1946. Acta fundacional de la CNCA, convenio para Escuela gratuita del Centro Católico de Obreros de Valladolid. Una esmerada recopilación y bien impresa de fotos nos ayuda magistralmente a conocer mucho mejor la CSC.
Gracias al autor por trabajo tan titánico y tan bien hecho. Aunque todavía no lo de podido leer del todo detenidamente, mi primera leída de corrido me ha encantado y me ha dejado las ganas de releerlo y consultarlo de modo obligado si quiero conocer de lleno los temas que trata.
Cordialmente
José Antonio Benito
