ROSARIO DIARIO EN LA CATEDRAL DE PAMPLONA
La asociación "esclavos del Rosario" logran mantener una tradición de modo ininterrumpido desde hace más de 200 años
Por fin he podido participar de algo tan sencillo y entrañable como el rezo del Rosario, pero a la vez tan extraordinario como hacerlo con la familia de los "Esclavos de María" de la catedral de Pamplona que lo hacen todos los días a las 7.30 de la tarde y de modo ininterrumpido en más de 200 años. Agradezco a su mayordomo Cruz Sarriguren y su organista Adolfo Castaño de León por la acogida cordial y su saludo afectuoso para todos los lectores de CORREO MARIANO. Y agradezco a Santa María el participar en uno de los rosarios del Mes de Mayo, con sus cánticos, recios y tiernos, la procesión por la nave de la catedral gozando de la belleza arquitectónica e iconográfica, el ofrecimiento floral, la visita al Santísimo, la posibilidad de confesión, acompañado con las notas del órgano, el ritmo acompasado de la campanilla al final de cada misterio, el fervor religioso en cada avemaría…Y, todo hay que decirlo, las pastas y el vinillo a los ocasionales participantes como servidor, que dejan las ganas de volver. ¡Ánimo, amigos, luchad por seguir siempre con tan bella costumbre y Dios quiera pasen el testigo a las jóvenes generaciones!.
Esta "congregación" laical se fundó bajo la advocación de Nuestra Señora del Sagrario en 1797. Fue el veinte de abril cuando un buen grupo de feligreses de la parroquia de San Juan Bautista, la parroquia de la Catedral, se reunió para dar cuenta que desde tiempo inmemorial se venía rezando el Rosario de esta Santa Iglesia, saliendo diariamente, según costumbre, al toque del Ángelus. Las constituciones se redactaron con licencia del Cabildo Catedral, que presentó su consentimiento el 24 de noviembre de 1797 y al año siguiente, el 1 de marzo, el Obispo aprobaba las mismas. Finalmente, el 19 de julio de 1799, el Real y Supremo Consejo del Reino aprobó dichas constituciones y dio permiso para su publicación, sugiriendo en el documento, como no es de extrañar, que al final del Rosario, junto a otras intenciones, se aplique un Ave María por el Rey y su Real Familia.
Se hicieron esclavos, desde el principio de esta andadura, feligreses de las otras tres parroquias de Pamplona y sus barrios de "fuerapuertas" y también de pueblos cercanos. La congregación, una vez constituida, quedó incorporada a la antigua Cofradía del Santo Rosario existente "desde tiempos venerables" en el convento de Santo Domingo, compartiendo con ella indulgencias que ya poseía, otorgadas por Papas y Prelados. Quedaron inscritas en ellas los nombres de los nuevos congregantes de la Catedral. Aquella cofradía fue fundada por los cortadores, por los trinchadores de carne, que "hicieron entre sí una Hermandad en nombre de la Virgen del Rosario, en el monasterio de Santiago de Pamplona" Las ordenanzas de estos carniceros fueron redactadas en 1852, aunque la Hermandad ya existía años antes. En 1571, el mismo san Pío V, principal
Entre las numerosas iniciativas cabe destacar la edición de la producción "Avemarías del Rosario de los Esclavos", en el 2010, que rescata una parte pequeña pero significativa del riquísimo y variado repertorio de avemarías, propias de la Congregación de los Esclavos del Rosario, compuestas por diferentes maestros de capilla de la Catedral, por organistas y por un buen número de músicos locales. Entre ellos destacan Julián Prieto, Mariano García, Hipólito Ramírez, en el siglo XIX. También hay autores del siglo XX como Daniel Piudo, Berruezo, Milagro, De Felipe, Zudaire. Todos los días se reza y se canta el Rosario de los Esclavos: en invierno, "sumido en la intimidad de una acogedora penumbra repleta de cuadros y retablos, que ya de noche se antojan misteriosos e incontables"; y en verano, a la misma hora, "cuando el sol cansado del Sarbil les saca los últimos brillos del día". Son noventa y dos Avemarías que forman parte del repertorio del Rosario de los Esclavos, obras de muy variados estilos.
Para conocer su historia, dinámica, espiritualidad, les aconsejo el artículo "El Rosario de los Esclavos de la catedral de Pamplona en el contexto peninsular" de Eduardo Morales Solchaga Cuadernos de etnología y etnografía de Navarra, ISSN 0590-1871, Año nº 43, Nº 86, 2011, págs. 127-146, https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=3852790 y el librito de Jesús Arraiza Frauca "Los esclavos de la Catedral", Pamplona, 1998, 119 pp.
http://www.iglesianavarra.org/
José Antonio Benito
