Quiroz Paz Soldán, Eusebio, 1940-
Para enseñar historia del Perú, Total KRAPS, Arequipa, /, 2008. 233 pp.
Hay que ser un maestro “para enseñar historia del Perú” como lo es don Eusebio, el “gordo Quiroz”, todo un monumento vivo de la eterna Arequipa. Y es maestro porque vive lo que enseña y enseña lo que vive.
De las 230 páginas deliciosas, les invito que arranquen con las cuatro finales “Acerca de lo que es la historia y cuál es su utilidad” y que, en forma de carta dirige a su nieto Diego. De forma rigurosa pero tan sencilla que lo entienda un niño, el Dr. Quiroz nos define la historia como “ciencia” cuyo objeto es “el pasado” y que “vuelve a crear en su mente gracias a las fuentes. La historia busca la verdad con método y riguroso trabajado, nos enseña de dónde venimos, nos permite identificarnos con un grupo social –somos peruanos- y tenemos restos culturales que nos permiten reconocernos unos a otros. Es el triunfo más grande el intelecto humano, al reconstruir etapas pasadas de la vida en sociedad. Nos enseña a comprender la vida y a encontrar el sentido del drama humano y social.
En su dedicatoria está presente su pequeña gran historia: “a la memoria de mis padres, a mi esposa, a nuestros hijos y a sus hijos...en ellos la vida vuelve a ser hermosa, lejos de la nostalgia y en la cercanía del otoño”.
Cuatro apartados: El primero dedicado a “Enseñar Historia del Perú” en el que nos comparte el valor formativo de la didáctica de la Historia y el deber de investigar antes de comunicar. El segundo “Temas”, nos aporta 32 reflexiones presentadas cronológicamente, desde el legado de la civilización andina hasta el 1945 con el gobierno de Sánchez Cerro). El tercero “Personajes”: Alcides Carrión, M. Uhle, Julio c. Tello, V.A. Belaunde, Luis E. Valcárcel, Jorge Basadre. El cuarto “Libros que ofrecen aportes para el estudio de la historia del Perú”: el “compendio” de José Tamayo Herrera, “el dios creador andino” de F. Pease, la crónica de Betanzos, la historia arequipeña de Travada, el “Perú, problema y posibilidad” de J. Basadre, el “decenio de la historia de Arequipa” de A. Villegas, el “movimiento popular de junio de 1950 en Arequipa” de Rocío E. Villamonte, “breve historia de un historiador. Un ensayo de egohistoria” de J.Tamayo Herrera, la “vida y obra del deán Valdivia” editada por la UNAS, el “Mariano Melgar”, de Enrique Carrión, “Nuestra historia” editado por COFIDE y escritos por L. Watanabe, J. Silva, L. Millones, N. Manrique.
El objetivo de la obra –con “la satisfacción de ayudar”- es brindar a los docentes de historia “un apoyo para su trabajo cotidiano, información actualizada, propuesta de nuevas ideas para enseñar viejos temas” (p.18). Don Eusebio nos comparte el fruto de los mejores años de su vida profesional docente, donde ha aprendido y enseñado, y donde descubrió “los puntos críticos de la enseñanza de la Historia”
Tras una lectura rápida, el historiador sabe que este rico compendio es fuente autorizada para sorber con rigor y sencillez cuando le toque enfrentarse en el quehacer cotidiano de la enseñanza a los múltiples asuntos estudiados.
Gracias, amigo y maestro don Eusebio. Espero que el libro con sabor a testamento tenga pronto nuevos continuadores que recojan la permanente actividad de su sabio magisterio.