LA CASTIDAD EN LOS JÓVENES.
EL EJEMPLO DE SANTA MARÍA GORETTI
Les comparto la profunda y directa Homilía para los jóvenes del P. Santiago Manso, CSM (Lima. Julio 2013). Muchas gracias.
Hay temas, sobre los cuales, los sacerdotes hemos dejado de predicar; y uno de estos temas, es el tema de la CASTIDAD...
Estamos celebrando la memoria de S. María Goretti. Creo que no es una santa desconocida para vosotros... Recordemos lo que ya hemos oído.., o leído.., o sabemos...
· Nace en 1890, de una familia campesina muy pobre.
· Es una niña piadosa; es huérfana de padre, y segunda de cinco hijos.
· Tuvo que trabajar duramente en su hogar y en el campo, para ayudar a su madre a sostener a la familia.
· Cuando contaba tan solo 12 años, un joven de 20, que vivía y trabajaba en las mismas tierras, se le insinuó varias veces, y ante sus negativas, intentó violentarla. Ante la firme resistencia de María al consentimiento impuro.., el joven la agredió brutalmente con un hierro afilado, ocasionándole 14 graves heridas en el pecho y en el abdomen.
· La niña muere poco después en el hospital, perdonando a su asesino y ofreciendo heroicamente su sufrimiento y su muerte.
· Fue beatificada en 1947 y canonizada tres años después por Pío XII el 24 de Junio de 1950.
· Su cuerpo está incorrupto en la Iglesia de Nuestra Señora de la Divina Misericordia en Nettuno (Italia).
· Su asesino, ya arrepentido, y después de haber cumplido condena, estuvo presente en la beatificación, junto a la madre de la santa, e ingresó como hermano en la Orden de S. Francisco donde murió en 1944.
· Al final de esta homilía os leeré su testamento espiritual...
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1. La primera pregunta que nos hacemos al escuchar la vida de María Goretti es: ¿Por qué se negó a las insinuaciones de ese joven?
a. ¿Por qué era feo y no le gustaba...?
b. ¿Por qué era más mayor que ella...?
c. ¿Por miedo al descubrimiento de la sexualidad o a su ejercicio...?
d. La respuesta que ella da es clara: porque era pecado...
2. La sexualidad es creación de Dios.., es un don a nuestra humanidad.., pero requiere y pide, el marco adecuado para que sea humana y divina al mismo tiempo. Fuera de ese marco se vuelve contra la persona..., y de un bien se convierte en un mal...
3. Por lo tanto la sexualidad es un don de Dios.., pero también requiere por nuestra parte de un esfuerzo a realizar y a sostener para que no se desvirtúe...
4. Al ser la sexualidad un don de Dios.., tiene que ser posible el ejercicio o no ejercicio de la misma... Los dones de Dios no esclavizan y menos envilecen..., siempre liberan nuevas potencialidades. De aquí deducimos que la castidad es posible y es para todos...
5. La castidad es posible y es para todos, si ponemos los medios para conservarla. Nuestro fundador, el Siervo de dios P. Tomás Morales apunta algunos, os los recuerdo para que los actualicemos:
a. En la mirada: cautos.
b. En pensamientos: cortar.
c. En el trato: cortes.
d. En las palabras: comedidos.
e. En el corazón: cautivos del Amor a Jesucristo.
6. El ejercicio de la castidad te va a permitir conocer la Voluntad de Dios en tu vida. Sin vivir castidad nunca te podrás entregar a Dios con seguridad de permanencia.., y sin vivir castidad nunca sabrás si una opción por el matrimonio fue correcta. En el primer caso por defecto, y en el segundo por aparente necesidad...
7. Jesucristo no llama a todos a la consagración, pero si llama a todos a la castidad, sea cual sea el estado de vida que abracemos... Habrá una castidad virginal y habrá una castidad matrimonial. Pero tiene que haber castidad siempre...
8. Hoy la castidad es más necesaria que nunca.., y hoy más que nunca está sufriendo persecución... Por lo tanto, debemos prepararnos para sufrir el martirio por ella...
9. El mejor índice de santidad para un joven.., es su nivel de castidad... No hay santidad sin castidad...
10. Jesucristo escogió el estado de vida virginal, no solo para darnos ejemplo de vida fecunda.., sino para adelantarnos nuestro estado de vida futura, es decir la eterna. "Allí en el cielo.., hombres y mujeres no se casarán, pues serán como ángeles..."
Os invito a que reviséis vuestra castidad en este momento actual de vuestra vida. Y que veáis si responde a las exigencias de nuestra vocación bautismal.
Termino estas palabras con las de Alessandro Serenelli, aquel que hirió de muerte a María Goretti, porque no consintió a sus deseos.
· "Soy un anciano de casi ochenta años y estoy listo para partir.
· Echando una ojeada a mi pasado, reconozco que en mi primera juventud escogí el mal camino, el camino del mal que me llevó a la ruina.
· Veía a través de la prensa, los espectáculos y los malos ejemplos que la mayoría de los jóvenes siguen ese mal camino, sin reflexionar.
· Y yo hice lo mismo sin preocuparme por nada.
· Tenía cerca de mí a personas que creían y vivían su fe, pero no me fijaba en esto, cegado por una fuerza salvaje que me arrastraba hacia el mal camino.
· Cuando tenía veinte años, cometí un crimen pasional, del cual hoy me horrorizo con sólo recordarlo.
· María Goretti, ahora una santa, fue el ángel bueno que la Providencia puso ante mis pasos.
· Todavía tengo impresas en mi corazón sus palabras de reproche y de perdón.
· Ella rezó por mí, intercedió por mí, su asesino.
· Luego vinieron 30 años de cárcel.
· Si no hubiese sido menor de edad, habría sido condenado a cadena perpetua.
· Acepté la sentencia que merecía, expié con resignación mi culpa.
· María [Goretti] fue realmente mi luz y mi protectora; con su ayuda, me porté bien y traté de vivir honestamente cuando fui aceptado nuevamente entre los miembros de la sociedad.
· Los hijos de San Francisco, los capuchinos de le Marche, me recibieron en su monasterio con su angélica caridad, no como a un sirviente sino como a un hermano.
· Con ellos convivo desde 1936. (Escribe en 1961, 8 años antes de su muerte).
· Ahora estoy esperando serenamente ser admitido a la visión de Dios, abrazar de nuevo a mis seres queridos, estar junto a mi ángel protector y a su querida madre, Assunta.
· Desearía que quienes lean estas líneas aprendan la estupenda enseñanza de evitar el mal y de seguir siempre el buen camino, desde la niñez.
· Piensen que la Religión, con sus mandatos, no es algo que pueda dejarse de lado, sino el verdadero consuelo, la única vía segura en todas las circunstancias, también en las más dolorosas de la vida. ¡Paz y bien!"
Alessandro Serenelli, 5 de mayo de 1961
