AL RENOVAR TU ERMITA
(CRISTO DEL HUMILLADERO)
Argimiro de la Nava Benito
De tu ermita Tú te fuiste
por renovar tu morada,
pero con un gran cariño
recibimos tu llegada.
Cuando del barrio te fuiste
hasta con llanto y con lágrimas,
pero bien lo sabes Tú
partiéndosenos el alma.
La Familia Iglesias Pérez
los materiales pagaron
y los vecinos unidos
a la ermita levantó.
Y al Humilladero el Cristo
muy contento regresó
y todos con alegría
le dijimos con amor:
"Vuelve a tu puesto de honor
al sitio de preferencia,
y desde él instrúyenos
en la verdadera ciencia.
Preside nuestras tareas
El noble trabajo nuestro
Y enséñanos como sabes
¡Oh soberano Maestro!
Y, pues, nos place habitar
entre lirios y azucenas,
antes que listos y sabios,
haznos puros, haznos buenos.
Por un exceso de amor
en la cruz estás clavado.
¡Que se amen todos los hombres
como Tú nos has amado!