Señor de los Milagros
Alfonso Francia
(Inspirado en una saeta que le canté un 18 de octubre en la Avda. Brasil)
Míralo, por donde viene,
el Señor de los Milagros,
míralo por donde viene,
con su rostro ensangrentado
por la corona de espinas
y la cruz de mis pecados.
Quisiera, Señor, yo ahora,
aliviar todas tus penas,
y quitarte las espinas
que yo puse en tu cabeza,
en tu cabeza divina.
Yo quisiera ir con tu Madre,
ser tu pobre cirineo,
y ayudarte en la subida
a tu Calvario de sangre,
y acompañar tu agonía
en los niños de la calle.
Perdona, Señor, los clavos
que clavé en tu santa carne,
y deja, Señor, que ahora
con bálsamo de mis lágrimas
limpie tu rostro de sangre.
Aquí está tu pueblo a los pies
para pedirte perdón
por tanto y tanto pecado,
de egoísmo y desamor.
Y te viene a agradecer,
el amor que le has mostrado,
la esperanza que le has dado,
y el regalo de la fe.
Ay, Señor de los Milagros,
no nos dejes de tu mano,
queremos estar contigo,
siempre y todos, a tu lado.
Ay, Señor de los Milagros,
no nos dejes de tu mano..