CARLOS DE FOUCAULD en "El olvido de sí" y "Fratelli tutti"
El olvido de sí. Una aventura cristiana (Pre-textos, Valencia, 2013, pp.386)
La vida del Beato Carlos de Foucauld, de por sí, se convierte en fascinante en esta poética biografía novelada en primera persona. El autor conoce muy bien los terrenos que pisa y los recovecos de la compleja personalidad de este inquieto buscador de Dios que para convertirse en "hermano de todos" se ha olvidado de sí, identificado totalmente con el humilde obrero de Nazareth. Sin quererlo uno encuentra reminiscencias de los grandes buscadores que nos han legado sus vivencias como San Agustín, san Juan de la Cruz, santa Teresa de Jesús, pero con tanto realismo que sentimos que nos va la vida en ello, de ahí que cualquiera de sus páginas puede ser motivo de autoanálisis introspectivo, subsidio de oración contemplativa, recreación literaria que nos plenifica.
La he leído tres veces y me deja con las ganas de volver a ella. Tan sólo comparto la introducción que me parece magistral y la conclusión de la última encíclica del Papa Francisco "Fratelli tutti" dedicada íntegramente a nuestro protagonista.
Ojalá se animen a leerla. ¡Buen provecho!
Pablo D' Ors: "LA ORACIÓN Y EL AYUNO Cuando alguien me pregunta qué debe hacer para encontrarse con Dios, mi respuesta es siempre la misma: ora, ayuna; y no me limito a decírselo, sino que oro y ayuno con él, pues rara vez llegará a hacerlo si al principio no se le acompaña. Jamás debe decirse a nadie que ore o ayune si no se está en disposición de orar y ayunar a su lado. Es más: decirlo sin hacerlo puede llegar a ser perjudicial. Si ha orado y ayunado, no hay hombre o mujer en el mundo a quien Dios no se le revele; y reto a cualquiera que realmente lo haya hecho a que diga lo contrario. Dios no se resiste a quien se pone en esta disposición. El problema nunca es que Dios se resista, sino por qué se resiste el hombre a descubrirle o, lo que es lo mismo, por qué desdeña el ayuno y la oración". p.21
Papa Francisco: Fratelli tutti
"En este espacio de reflexión sobre la fraternidad universal, me sentí motivado especialmente por san Francisco de Asís, y también por otros hermanos que no son católicos: Martin Luther King, Desmond Tutu, el Mahatma Mohandas Gandhi y muchos más. Pero quiero terminar recordando a otra persona de profunda fe, quien, desde su intensa experiencia de Dios, hizo un camino de transformación hasta sentirse hermano de todos. Se trata del beato Carlos de Foucauld. Él fue orientando su sueño de una entrega total a Dios hacia una identificación con los últimos, abandonados en lo profundo del desierto africano. En ese contexto expresaba sus deseos de sentir a cualquier ser humano como un hermano, y pedía a un amigo: «Ruegue a Dios para que yo sea realmente el hermano de todos». Quería ser, en definitiva, «el hermano universal».288 Pero sólo identificándose con los últimos llegó a ser hermano de todos. Que Dios inspire ese sueño en cada uno de nosotros. Amén" (n. 286).